Descubre a Myriam y Pau – Nosaltres4viatgem
1. Presenta brevemente a tu familia (Quiénes sois, edades, de dónde sois, vuestra historia, profesiones, etc)
Hola!!
Hola! Somos Myriam (47), Pau (44), Ernest (13) y Ferran (11). Una familia que residimos en El Campello (Alicante). Como me gusta decir desde pequeña, siento – ahora sentimos – que nuestras raíces están bien sujetas a esta tierra alicantina en la que vivimos habitualmente pero, nuestras raíces son muy flexibles y elásticas y, es por ello que no nos resulta nada difícil alejarnos de vez en cuando de aquí. Es más, lo necesitamos.
Nos dedicamos a vivir, que no es poco, y además somos “profesionales de la educación” aunque nos gusta más decir “del aprendizaje”. Tanto los adultos de la familia como nuestros hijos consideramos que nuestro estilo de vida se basa en la conciencia y el placer de aprender. Somos personas apasionadas que encontramos excusas para ampliar nuestros horizontes en cualquier circunstancia de nuestro día a día: cocinar, leer, resolver un conflicto, viajar, comentar, observar…
Esta realidad la llevamos a las aulas. Pau y Myriam somos profesores de educación secundaria y bachillerato en las ramas de filosofía y ciencias naturales respectivamente. Después de casi 20 años trabajando en la educación pública hemos tenido muchas etapas de intenso aprendizaje y reflexión. De necesitar alejarnos para coger impulso, para observarnos y observar el sistema en el cual estamos integrados e intentar mejorar y corregir nuestro estilo de enseñanza-aprendizaje.
Nuestros hijos se reconocen personas que disfrutan yendo al colegio pero también son conscientes que no es allí donde “aprenden más cosas”. “Para aprender no necesitamos ir al cole” pero nos gusta porque allí tenemos amigos y maestros con quienes nos relacionamos y compartimos tareas y actividades.
A los cuatro nos encanta viajar y que esta pasión sea un sello identitario de nuestra familia es responsabilidad de Myriam que, desde bien niña, viajó con su familia y sola. Por diversos motivos pude viajar desde bien joven y aproveché cualquier oportunidad para hacerlo: intercambios, concursos, proyectos, becas de estudio y de viaje… Cuando creamos nuestra familia Pau entendió que “tener la mochila preparada” era una condición necesaria para que nuestra relación funcionase. Así establecimos nuestra vida entre su pueblo, Bocairent (Valencia), El Campello (donde tenemos nuestra residencia) y el mundo.
2. Describe vuestro estilo de viaje worldschool (cuánto tiempo lleváis haciéndolo, cómo lo hacéis, viajáis lento, rápido, por temporadas y brevemente dónde habéis estado).
En primer lugar, dejar claro que a nosotros nos cuesta definirnos como worldschoolers ya que solemos asociar este concepto a una vida más nómada que la nuestra. La vida de un funcionario de carrera como somos nosotros no parece muy compatible con un viajero libre y autónomo. Sin embargo, es cierto que no hace falta salir muy lejos para vivir la vida como worldschoolers. Lo importante está en tu mente. Por ejemplo, se puede conocer el mundo sin salir de casa, recibiendo a otros viajeros. Esto es algo que nosotros hacemos gracias a plataformas como Couchsurfing, Warmshawers o HomeExchange.
Recibir a personas en casa es una oportunidad para nosotros cuatro para aprender, compartir, ofrecer nuestro hogar a otras personas y compartir aquellos que tenemos y que otras personas pueden necesitar.
Llevamos viajando “toda la vida”, especialmente Ernest y Ferran. Desde que nacieron – y ya antes – viajan y, cuando apenas tenían 2 y 4 años hicimos nuestro primer gran viaje aprovechando una excedencia laboral de 6 meses para recorrer la costa sudamericana del Pacífico desde Tierra de Fuego a las Galápagos. En realidad fue un viaje muy lento por Chile, algunos puntos de Argentina y las islas Galápagos. Fue un regalo que nos hicimos para concluir lo que sentimos era la primera etapa de crianza de nuestros hijos. Fue en enero de 2013, cuando sentimos que empezaban a dejar atrás la etapa de bebés para recibir a esos niños que ahora – en 2021 – también estamos despidiendo mientras recibimos a unos jóvenes adolescentes.
Viajamos por temporadas aprovechando las vacaciones escolares pero, cada ciertos años, intentamos tomar unos meses de excedencia para hacer viajes más largos. Nos parece necesario para enriquecernos como personas, para salir de la rutina del trabajo, para reciclarnos… Además, en alguna ocasión, hemos trazado algún proyecto familiar que nos ha servido de eje vertebrador en nuestro viajes. Así fue, por ejemplo, cuando en 2019 viajamos visitando escuelas Waldorf en América para hacer voluntariado y conocer cómo se gestionan y organizan este tipo de escuelas.
Intentamos viajar lento pero casi siempre nos parece que vamos más rápido de lo que deberíamos. La necesidad de viajar sin prisa, de vivir sin obligaciones, de estar juntos… se entrecruza con la ilusión de visitar sitios bonitos o interesantes y, a veces, cuesta encontrar el equilibrio. Pero sí, sentimos que preferimos “ser” a “estar” y, para poder “ser”, se necesita tiempo. Así las personas y los lugares se despliegan ante ti y te conviertes en alguien para otro alguien y los lugares son mucho más que una simple chincheta en el mapa.
Como familia hemos viajado mucho en estos 13 años que llevamos juntos. Por períodos más o menos largos pero no demasiado. La etapa más larga fue un mes en el lago Atitlán en Guatemala.
3. Describe vuestro estilo educativo – worldschooler (educación tradicional, homeschoolers, unschoolers, etc)
Se podría decir que nuestro estilo educativo es bastante tradicional si bien, como madre y padre, y como profesores, nuestro modelo educativo se ha ido transformando desde el momento que tuvimos hijos y empezamos a reflexionar sobre el modelo educativo que considerábamos mejor.
Centrarnos en el ser humano que hay en cada persona, en su desarrollo personal y social es prioritario. Incentivar la autonomía, el gusto por la observación y el autoaprendizaje es esencial. Valoramos mucho el contacto con la naturaleza y el desarrollo de las capacidades artísticas y espirituales del ser humano.
En este camino de búsqueda, encontramos las aportaciones de la pedagogía Waldorf como aquella que más se acercaba a nuestras necesidades humanas y familiares. Contribuir formando parte de una comunidad educativa como espacio de aprendizaje para todos, el alumnado, las familias y los trabajadores de la escuela, nos pareció muy enriquecedor. Así decidimos llevar a nuestros hijos al jardín de infancia de la Escuela Waldorf de Alicante que lleva ofreciendo sus servicios desde hace más de 30 años.
En este camino nos involucramos en su gestión y ayudamos a otras familias a llevar adelante la creación de una escuela de primaria y secundaria. Han sido muchos años de esfuerzo e implicación, aún queda mucho por hacer pero estamos satisfechos de nuestra aportación.
Así, mientras estamos en Alicante, nuestros hijos asisten a esta escuela y, cuando viajamos, a veces buscamos también escuelas vinculadas con esta pedagogía para conocer y formar parte de estas comunidades.
4. ¿Por qué elegísteis este camino de aprendizaje?
Creemos que la pedagogía Waldorf es la que mejor se aproxima al conocimiento del niño/a y al respeto de sus necesidades como ser humano. Más allá de la escolarización tradicional y de los objetivos curriculares, los humanos tenemos unas necesidades afectivas, emocionales, artísticas, creativas, motrices… que son prioritarias en el desarrollo de cada persona.
5. ¿Cuáles son los mayores regalos o beneficios que has experimentado como familia worldschooler?
Lo enriquecedor que es salir de tu zona de confort, de la rutina de la comodidad. Todo esto nos ayuda a vivir con menos esfuerzo, es necesario, especialmente si estamos acostumbrados a vivir solo así. Pero cuando ofreces a tu mente y a tu cuerpo a nuevos horizontes, nuevas comunidades, nuevas comidas, nuevos idiomas… nos desplegamos. Nos damos cuenta de que tenemos muchas más potencialidades.
Aprendemos mucho más, tenemos muchos más recursos a nuestro alcance si miramos el mundo con interés y voluntad de aprendizaje.
Reconocemos que también puede resultar agotador y por eso, en nuestro caso, necesitamos también nuestro tiempo en familia, con amigos y la comunidad que hemos generado en estos años. Por otra parte, aportar nuestra visión de la educación y contribuir a mejorar la educación pública, es para nosotros un compromiso importante.
6. ¿Cuáles son vuestros mayores retos (educación, viaje, salud, trabajo) y cómo han influido en vuestro camino worldschool.
Nuestro mayor reto es la crianza de nuestros hijos así como cuidar de nuestra pareja. Por otra parte, nuestra formación como profesores de secundaria es algo muy importante para nosotros y siempre intentamos mejorar en nuestra faceta profesional, implicarnos en nuestro centro educativo. Además, nuestra contribución a la gestión de la Escuela Waldorf de Alicante ha sido también muy importante en los últimos diez años de nuestra vida.
Los viajes nos ayudan a inspirarnos, a profundizar en nuestras relaciones familiares y a enriquecernos como personas. Todo esto nos permite ser quienes somos y construir lazos con todas las personas que encontramos en el camino.
7. ¿Cómo se financian?
Nuestra financiación es nuestro sueldo. Para nosotros no hay mejor inversión que viajar y viajar por largos periodos de tiempo. Entendemos que no hay mejor manera de gastar nuestro dinero que en tiempo para estar con nuestros hijos, nuestra familia y, si es posible, aprovechar para conocer el mundo.
Además, apostamos por el voluntariado, dedicando parte de nuestro tiempo a colaborar en proyectos y a recibir viajeros en casa que pueden necesitar nuestros recursos o un alojamiento en un momento determinado.
8. Comparte un momento clave que hayáis vivido en vuestro camino worldschool (una historia inspiradora del camino).
Sin duda, el viaje que hicimos durante 3 meses visitando escuelas Waldorf de Estados Unidos, México, Guatemala y Brasil marcó un antes y un después. Hacer voluntariado es tan enriquecedor que superó todas nuestras expectativas. Aprendimos mucho y disfrutamos inmensamente. Nuestros hijos entraron en las aulas de las escuelas que visitamos para seguir allí sus clases y fue una experiencia increíble para ellos también.
Anteriormente, nuestro viaje de 6 meses en 2013 cuando eran aún tan pequeños fue un regreso a la vida nómada, a las mochilas, a los hostales y era algo que echábamos de menos. Nuestros hijos fueron nuestro mejor pasaporte, viajar con bebés fue una alegría que no esperábamos. Muchas personas piensan que los bebés y niños son una limitación para viajar – para vivir – pero nosotros comprobamos de primera mano que es todo lo contrario: son la mejor tarjeta de presentación.
Ir de pueblo en pueblo con ellos, con su sonrisa, su inocencia, su interés por descubrir el mundo fue maravilloso y es algo que recomendamos a todo el mundo cuando tiene hijos. Ahorra, intenta pedir un permiso laboral, organiza tu vida para disponer de tiempo y dedica tiempo a tus hijos porque es el mejor regalo que podéis haceros.
9. ¿Qué papel tiene la comunidad en vuestra experiencia worldschool?
Es sobre todo una inspiración y motor de nuestras ilusiones. Hay veces que en tu propio entorno puedes sentirte “un bicho raro” pero cuando compartes con otras personas un estilo de vida, un proyecto, una ilusión, todo se hace más sencillo y factible.
10. ¿Qué dirías a otra familia que está considerando hacer worldschooling pero tiene dudas?
Las escuelas representaron una revolución en la educación y en la formación de sociedades en las que las personas eran únicamente elementos de producción en las industrias, la agricultura… No podemos discutir que representaron un gran avance social. Sin embargo, el aprendizaje y la formación no están circunscritos a las escuelas. Al contrario, y eso es algo que también sufrimos a veces cuando intentamos trabajar en las escuelas porque las prioridades sociales, las modas, los compromisos externos, también lastran el trabajo del docente.
Pero también es una oportunidad, más allá de los “recintos educativos” hay una cantidad de recursos inabarcables para vivir la vida, aprender, construirnos como seres humanos.
No podemos ver las leyes, las normativas educativas como una limitación. Son una estructura que intenta asegurar unos servicios básicos y necesarios, pero como familias, podemos buscar alternativas que nos enriquezcan más o se ajusten más a nuestras necesidades. Si es así, hay que luchar por ellos.
11. Dónde podemos encontraros (web, redes sociales, etc)
Si te ha interesado o ya eres una de estas familias únete a la Comunidad Planeta Worldschool.
Cada día compartimos temas inherentes a al worldschooling, como educación, crianza en movimiento, financiación, trabajos localmente independientes, tipos y trucos de viaje, pero lo más importante, creamos conexiones entre muchísimas familias alrededor del mundo.